¡Hola, querida Bride-to-be!
Sabemos que en la planeación de tu boda hay decisiones que se sienten tan mágicas como desafiantes… y una de ellas es: ¿verse antes en un first look o esperar hasta el altar para ese primer encuentro lleno de emoción?
Para ayudarte a inspirarte y tomar la decisión que mejor refleje tu historia de amor, platicamos con el talentoso fotógrafo Andrés Mondragón. Con un estilo documental y editorial, Andrés se dedica a capturar la esencia más pura y auténtica de las parejas, esos instantes que hacen que cada foto no solo sea una imagen, sino un recuerdo vivo.
En esta entrevista, nos comparte cómo cada opción tiene su propia magia: la intimidad y ternura de un first look, o la fuerza y tradición de verse por primera vez en el altar rodeados de sus seres queridos.
Prepárate para dejarte inspirar por su mirada sensible y descubrir qué camino resuena más con tu corazón.
First Look vs Verse en el Altar
Para comenzar, cuéntanos un poco sobre tu estilo como fotógrafo de bodas.
Considero que mi estilo es documental con un enfoque editorial. Me concentro en capturar la esencia natural de las personas y las situaciones del día, pero siempre cuidando la estética y la coherencia visual. Busco que mis fotos se sientan auténticas y que quien las vea pueda transportarse y sentir que estuvo ahí.
¿Cuál de estas dos opciones te parece más especial desde el punto de vista emocional? ¿Por qué?
Creo que cada pareja es diferente, y esa decisión debe tomarse según su personalidad y la logística de la boda. Ambas opciones tienen pros y contras:
First look:
Da un espacio íntimo para que la pareja comparta un momento a solas durante el día.
Permite reacciones más libres y emocionales en un ambiente privado.
Según la hora, puede que la luz no sea la ideal (si se acerca al mediodía, suele ser más dura).
Altar:
Tiene un valor más tradicional.
La presencia de los invitados intensifica las emociones.
Permite compartir la reacción con sus seres queridos y documentar esas expresiones.
Dependiendo de la hora de la ceremonia, puede ofrecer mejores condiciones de luz al terminar.
¿Qué tipo de emociones logras capturar durante un first look que quizás no se dan en el altar?
En un ambiente íntimo suelen surgir reacciones más expresivas: abrazos largos, risas nerviosas, el novio girando a la novia para admirar el vestido, o incluso palabras espontáneas que quedan registradas en video, dando un material muy especial.
¿Y qué magia crees que tiene el momento clásico de verse hasta el altar?
Además de la tradición cultural, el compartir un momento tan cargado de emociones frente a las personas más importantes para la pareja lo vuelve inolvidable. Aunque es una opción más protocolaria, suele brindar una atmósfera muy poderosa.
¿Cómo se vive ese momento desde tu cámara? ¿Qué detalles buscas capturar en cada caso?
En ambas situaciones priorizo que los novios vivan la experiencia plenamente, porque vivir grandes momentos generan grandes fotos. Busco no solo sus reacciones, sino también los pequeños detalles cómo la reacción de las manos, las expresiones del rostro, el entorno y, cuando aplica, las emociones de los invitados o testigos del encuentro.
Si el encuentro ocurre en el altar, soy especialmente cuidadoso en no obstruir la vista de los asistentes, respetando que el momento también es para ellos.
¿Cómo ayudas tú a preparar el ambiente para que ese momento sea auténtico, sin sentirse incómodos o forzados?
Lo principal es crear un espacio cómodo, privado y con buena luz. Les explico lo que sucederá para que estén tranquilos y disfruten sin preocuparse por nada. Les digo que simplemente vivan el momento, y que cuando veamos que ya ha terminado y sea necesario intervenir, yo los guiaré.
¿Has tenido alguna historia inolvidable de first look o de un primer vistazo en el altar que puedas compartir?
En una ocasión, el papá del novio había tenido una situación muy difícil en donde estuvo preso 15 años El novio decidió casarse hasta que su padre fuera declarado inocente y pudiera acompañarlo.
El día llegó, y durante todo el día de la boda, el papá grababa cada instante con su celular, emocionado de poder documentar algo que había esperado por tantos años. ( Era lógico, hace 15 años no existían los celulares como los conocemos hoy, y no tenían las capacidades de grabar y compartir los momentos como lo hacemos ahora, su emoción era evidente).
Cuando llegó el first look, él no respetó mi sugerencia de dejar a los novios a solas y ya estaba listo para grabar el encuentro. En lugar de pedirle que se retirara, decidí fotografiarlo como parte del momento. Al final, su presencia y su emoción también eran parte de la historia de la pareja y de ese día
Por último, ¿qué consejo le darías a una pareja que no sabe qué opción elegir?
Elijan la opcion que al imaginarse los escenarios, los emocionen mas, o crean que les daría mas sentimiento.
Y así, querida Bride-to-be, cada historia de amor encuentra su propio ritmo y su momento perfecto. Ya sea en la intimidad de un first look o en la emoción compartida del altar, lo más importante es vivir cada instante con el corazón abierto y dejar que las emociones hablen por sí mismas.
Si quieres conocer más sobre el trabajo de Andrés Mondragón y dejarte inspirar por su mirada única y sensible, no dejes de visitar su perfil. ¡Te prometemos que cada imagen te hará sentir que estás viviendo esos momentos mágicos junto a las parejas!
¡Nos vemos pronto xoxo!
